Muchos conductores desconocen cuándo y cómo cambiar el líquido de frenos, un mantenimiento esencial para garantizar la seguridad al conducir, según expertos de Bosch.
Para quienes manejan a diario, el sistema de frenos debe funcionar de manera óptima. Verificar regularmente el estado del líquido de frenos es fundamental, ya que con el tiempo este fluido pierde sus propiedades, afectando la eficacia del frenado.
El líquido de frenos es un fluido hidráulico que transmite la fuerza desde el pedal hacia el sistema de frenado. Es crucial que mantenga un punto de ebullición alto para evitar la formación de burbujas de vapor, esto debido a las propiedades del fluido de caracter higroscopicas, las cuales podrían comprometer la capacidad de frenado. Dependiendo del modelo del vehículo, se utilizan líquidos como DOT3, DOT4 y DOT5.1.
Bosch, líder en tecnología de sistemas de frenos, recomienda:
El correcto mantenimiento del sistema de frenos no solo garantiza la seguridad de los ocupantes del vehículo, sino que también contribuye a una conducción más eficiente y confiable. Ignorar el estado del líquido de frenos puede derivar en fallos críticos, especialmente en situaciones de emergencia, por lo que su revisión periódica debe ser una prioridad para todos los conductores.
“En Bosch trabajamos continuamente para garantizar la seguridad de nuestros clientes. Por ello, recomendamos realizar el mantenimiento del sistema de frenos en talleres especializados, donde se utilicen herramientas y técnicas adecuadas para preservar la funcionalidad y eficacia del vehículo”.
-Samuel Novoa, Entrenador Técnico Comercial.
Bosch se compromete a ser un aliado clave en la seguridad vial, ofreciendo tecnologías avanzadas y asesoramiento especializado. Realizar un mantenimiento adecuado del sistema de frenos no solo extiende la vida útil del vehículo, sino que también garantiza una conducción más segura para todos en
las carreteras.